El Día del Padre puede ser una fecha delicada para muchas personas por múltiples razones, la más común se debe a la ausencia de una figura paterna o una mala relación con él promovida por los estereotipos del patriarcado.
Desde Feminismo Inc. quisimos conversar con algunos hombres sobre cómo viven sus paternidades desde una visión igualitaria cuando el tema de la crianza y los cuidados está más presente que nunca en la conversación.
José de Bastos – Periodista y politólogo
“Lo principal para nosotros, y creo que afortunadamente para muchos en esta generación, es no limitarnos con los estereotipos. Es decir, nunca pensamos que la mamá iba a ser «la cariñosa» y el papá «el que pone orden». Nunca fue el plan que mamá fuera la principal en la crianza de los hijos y papá secundario.
Esa simple «libertad» considero que es fundamental, para que padre y madre no se sientan limitados por lo «tradicional». Y claro, eso luego se ve reflejado en responsabilidades específicas. Mi esposa y yo trabajamos así que cuando uno está más ocupado, el otro se encarga de más cosas, ya sea cocinar, comprar, lavar ropa o trasnocharse si la niña no duerme bien.
A pesar de todo esto, no es sencillo lograr la plena igualdad. Creo que por temas de crianza tanto de niñas como de niños, yo a menudo no pienso en cosas del hogar que hay que hacer, más allá de lo inmediato y obvio, mientras que mi esposa a menudo tiene en mente obligaciones más de mediano o largo plazo. Y en esa brecha ella termina asumiendo más responsabilidades. Es algo de lo que hablamos a menudo e intento solucionar, pero ciertamente sigue siendo el principal desbalance en la igualdad entre ambos.”
Augusto Leiva – Fundador y CEO de Comisuras – Sharing Branding & Knowledge
“Para mí una paternidad en igualdad se trata de un buen reparto de las tareas del hogar, conciliación de los trabajos de ambos por igual y exigir el permiso de paternidad con los mismos plazos temporales que los de la madre.
En el plano de la pareja con mucha comunicación sobre cómo se organizan las cosas en el hogar y de cómo se siente cada uno hacia el otro y desde el plano hacia los niños sería gestionar el apego de ambos padres.”
Fernando Santiago – Director de ARTEVIA
“Lo vivo como una responsabilidad que además de compartida en los esfuerzos requiere de ir manteniendo conjuntamente un espacio de acuerdo en cuanto a los objetivos. Con frecuencia es sencillo porque las cosas ruedan, otras veces exigen más implicación de los dos, en todo caso me parece necesario que las decisiones se tomen siempre buscando un camino que tenga presente las inquietudes y deseos de ambos, así como las de nuestro hijo.”
Fermín Mármol García – Abogado. Autor de “La Revolución de la Muerte” y “Lo que no se aprende en los pupitres.”
“Ser padre es la materialización de una etapa muy deseada en mí, que sólo la concibo si se ejerce en conjunto procurar la mejor fórmula. La paternidad es una verdadera aventura diaria e imaginarla sin el debido complemento con mi pareja y socia de vida, no es posible. ¿Quién va para una aventura tan larga para disfrutarla solo y sortear lo sobrevenido sin su compañero? Nadie que pudiera y se considere inteligente, así como sensato lo haría.
La paternidad tiene dos pilotos, no uno con ayudante, son dos iguales que deben ser talentosos para acordar la ruta y modificarla cuando las circunstancias lo ameriten. Ello se logrará provistos de herramientas poderosas, como lo son el amor y la constante búsqueda de información, teniendo presente siempre que el hogar es un ambiente que influirá en los pequeños, mucho más que dos docenas de docentes, por lo que el huerto familiar debe dar los frutos de buenas costumbres, debido ejemplo, tolerancia, respeto por lo distinto y responsabilidad, con una estrategia de gran fluidez en la comunicación.”
Román Domínguez Antoranz – Economista y director de Ekodir
“Para mí guarda relación con varias cosas, desde la concepción, asumir el derecho de la madre a decidir, pero mantenerse involucrado hasta sus últimas consecuencias sea cual sea la decisión. También, mantener la predisposición positiva a ser padre único, separando la situación de la pareja de la paternidad, asumir como natural quedarse con los hijos en caso de viudez y no asumir que se les debe buscar otra madre.
Esa predisposición positiva también pasa por encargarse completamente de ellos en situaciones de ausencia temporal o parcial, es decir que la madre esté muy ocupada por trabajo o porque está enferma o porque tuvo que viajar. La predisposición positiva la veo como la base de una negociación, no como una concesión automática hacia ella. Creo que así ambos pueden hablar sobre sus sueños y carreras con menos carga de culpa y con mayor posibilidad de colaboración común.
Después lo veo en lo cotidiano. El embarazo de mis hijos era una posibilidad de contacto íntimo intermediado por su madre. Mi hija se acostumbró a mi llegada a casa y la anticipaba con patadas y movimiento desde algunos minutos antes.
Una paternidad con criterio género sensitivo es también criar hijos e hijas sin privilegios, sin preconceptos sobre su comportamiento y su relacionamiento, especialmente en su vida sexual, que protegí en ella desde el principio para que no se creyera predestinada a un matrimonio o una relación de una sola pareja desde muy joven.
Por último, reconociendo inevitable una carga física y psicológica mayor por parte de la madre en etapa de embarazo y cuidados neonatales, predisposición a un esfuerzo mayor para que disponga de espacios de descanso y entretenimiento propios y para lidiar con la revolución hormonal forzada por el embarazo y la lactancia.”
Luis Martínez – Director de Oportunidad AC
“Para mí lo básico es el tema de la corresponsabilidad en el hogar y el cuidado, en que hacer del día a día, como padre y miembro de la familia.”
Miguel Santana – CEO Go4us
“La pregunta para mí tiene dos ópticas, desde la óptica de esposo que junto a una pareja tienen hijos y como tú tienes responsabilidades en una sociedad donde siempre se ha enseñado que la mujer es la responsable de la casa.
Desde la óptica de tener dos hijos, niña y niño, para mí lo más importante siempre fue que fueran sanos, de verdad no me importaba el sexo que tuvieran. Cuando mi esposa me dijo que nuestro primer hijo iba a ser una niña además de la felicidad, lo que quería era que mi hija estuviera sana, nada más. Luego con mi hijo oímos muchos estereotipos, especialmente con lo de “ya tienes la parejita, ya estás contento”. Eso es una tontería.
La igualdad se ve cuando no hay diferencias entre mamá y papá en el cuidado de los niños. Es una responsabilidad compartida como pareja.”
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Mientras esperamos el fin de una pandemia que puso foco en otra que las feministas ya conocíamos bien y luchamos por erradicar, vale la pena reflexionar hoy, y todos los días, sobre la corresponsabilidad y el rol de los papás en la creación de sociedades igualitarias, sanas, justas, sin estereotipos, sin violencia y que en definitiva promueven una vida mejor para todos y todas.
Celebremos a esos hombres que sí están presentes, aquellos que combaten las enseñanzas machistas de toda la vida, quienes aman, cuidan, respetan y velan por sus hijos, su pareja y por su hogar.
¡Feliz día del padre!
