Compartimos con todos el trabajo realizado por Nermary Yibirin, realizado con ocasión de realizar el Diplomado en Empoderamiento organizado por la Universidad Monte Avila y Voces Vitales Venezuela. Sin duda que un momento histórico de tal trascendencia como este, de ver a una mujer por vez primera optando para la primera magistratura de la nación más poderosa del planeta, es como para analizarlo y tomar del caso lo que nos ayude a empujar a otras a lograr tal hazaña. Hasta que ya no sea visto como una hazaña el que una mujer sea Presidenta.
A continuación el trabajo de Nermary:
Una mujer en la Casa Blanca es el título del presente análisis, ya que en la historia política norteamericana, nunca una mujer ha llegado al cargo de Presidenta de los Estados Unidos. En la actualidad, esta posibilidad es bastante probable con Hillary Clinton quien es candidata presidencial por el partido Demócrata. La elección de Hillary como candidata ha marcado un antes y después en la historia del feminismo mundial, dejando un legado para todas las mujeres que creemos y apostamos por lograr más y hacer mas, aun teniendo familia, hijos y hasta nietos, Hillary es inspiración y ejemplo de que si se pueden lograr las metas, que ser mujer no te condiciona a solo ser madre y ama de casa, que se pueden congeniar ambas cosas: vida personal y laboral y aun así tener éxito.
Su carrera hacia la Casa Blanca y el ejercicio de su liderazgo está plagado de curiosidades, técnicas y procesos que nos sirven de referencia a todas las mujeres, de cómo podemos manejarnos ante situaciones como las que se ha enfrentado la Sra. Clinton, desde el escándalo de su esposo Bill con Mónica Lewinsky, quien trabajaba como becaria no remunerada en la Casa Blanca en 1995 y 1996, y sostuvo una relación con el para entonces presidente Clinton, hasta el debate con Donald Trump, el actual candidato republicano y el más fuerte adversario para Hillary en su carrera hacia la Casa Blanca, pasando por el escándalo de los correos electrónicos, todas las estrategias que ha usado Hillary se estudiaran en el presente análisis de caso. Hillary junto con mujeres como Margaret Thatcher, ex primera ministra de Inglaterra y Angela Merkel, actual Canciller de Alemania; se han convertido en referencia obligada del feminismo actual, del liderazgo político y éxito femenino, siendo ejemplo de liderazgo para todas nosotras.
El liderazgo político femenino en el mundo causa impacto y asombro en la mayoría de las personas, quienes, debido al pensamiento patriarcal de la sociedad, donde la mayoría política está dominada por los hombres, no se acostumbran a ver mujeres poderosas, es por ello que cada vez que una fémina ha logrado alcanzar puestos de poder político, se hace un hito en la historia y es digno de estudiar y debatir, ya que sin duda el patriarcado se evidencia en el mundo, donde se ha relegado a la mujer a trabajos del hogar, o de servicio, ganando porcentualmente menos salario que los hombres, ignorándolas en la participación, en la toma de decisiones importantes y en el manejo de dinero.
Dentro de la política predominan los hombres, dentro de la religión también, la mujer es siempre vista como vulnerable para estas cosas, y subversiva si aspira mas. Todo esto ha llevado que el porcentaje de participación femenina en los ámbitos de poder sea menos que el de los hombres, desechando una gran colaboración que puede dar la perspectiva femenina al mundo y su desarrollo sustentable y ecológico. Todos los países son importantes dentro del ecosistema económico y político mundial, pero sin duda Estados Unidos es trascendental, por algo es denominada la primera potencia mundial, y quizás es por ese mismo desarrollo social que una mujer ha podido llegar a merecer el titulo de candidata a la presidencia. Hablamos de Hillary Clinton. Aunque Clinton participó en la carrera a la candidatura presidencial en el año 2008, ese año gano la candidatura (y la presidencia) Barack Obama, quien se postuló por el partido demócrata, siendo en ese momento Hillary mucho mas calificada y experimentada que el señor Obama, pero como una gran líder y mujer, Hillary acompañó y apoyo a Obama en su candidatura y luego, al Barack convertirse en presidente, como Secretaria de Estado de su primer mandato.
Clinton estableció una marca para secretarios de Estado, visitando 100 países durante su periodo como Secretaria de Estado, es por ello que la afamada revista Time escribió que «La resistencia de Clinton es legendaria» demostrando su poder y es ahora en el 2016 cuando finalmente a sus 68 años, es elegida como candidata a la presidencia por su partido. Esto evidencia lo que muchas feministas han venido planteando, a la mujer le cuesta mucho más que al hombre llegar a los puestos de poder, los paradigmas y creencias con respecto a la mujer siguen vigentes aun cuando estamos en pleno siglo XXI, es por ello que el estudio del liderazgo de Hillary es relevante, ya que marca una nueva forma y estilo de liderazgo. La posibilidad de una mujer en la Casa Blanca por primera vez, es, sin duda, un caso de análisis.
Estados Unidos es considerado la primera potencia mundial, desde 1945 hasta 1991 compartió dicha denominación junto con la unión soviética, anterior a dichos países, fue la Alemania nazi la primera potencia mundial (1939-1945). A partir de 1991 hasta nuestros días Estados Unidos se consagro de forma única como la potencia más grande del mundo todo esto, gracias a su poderío militar, riqueza económica, y desarrollo tecnológico. De igual forma es la economía nacional más grande del mundo en términos nominales, La Unión Europea tiene una economía más grande, pero no es una única nación. Considerar que la primera potencia del mundo sea precedida por una mujer parece cosa sencilla, pero no lo es, la lucha de la mujer y la igualdad de género es antigua, y hace apenas pocos años atrás la mujer pudo ejercer derecho al voto, por ejemplo en América Latina fue en 1927 en Uruguay donde se aprobó por primera vez el sufragio femenino, y en los Estados Unidos es a partir de 1920 que las mujeres ejercieron su derecho al voto. Aun existen Estados donde el voto femenino no vale, siendo irónicamente la Ciudad del Vaticano, donde sólo pueden votar los cardenales, que según la carta apostólica Ordenatio Sacerdotalis, son obligatoriamente hombres.
Actualmente, es el único país en el que las mujeres no pueden votar. Es por todas estas consideraciones la importancia de estudiar el liderazgo político de Hillary Clinton, quien, aunque gane o pierda en las próximas elecciones del 08 de noviembre del 2016 en los Estados Unidos de América, ya ha hecho historia y para siempre.
Hillary Diane Rodham Clinton, más conocida como Hillary Clinton nació en Chicago, Estados Unidos el 26 de octubre de 1947. Hillary es una abogada y política estadounidense, actual candidata por el Partido Demócrata a la presidencia de los Estados Unidos en las elecciones de noviembre de 2016. Es la primera mujer candidata en obtener ese estatus de parte de uno de los partidos más importantes de Estados Unidos. Se desempeñó como la sexagésima séptima Secretaria de Estado de los Estados Unidos de 2009 a 2013, senadora junior de los Estados Unidos representando a Nueva York de 2001 a 2009, primera dama de los Estados Unidos de 1993 a 2001 y primera dama de Arkansas de 1983 a 1992. En 1975 contrajo matrimonio con Bill Clinton. Su única hija, Chelsea, nació en 1980. Poco tiempo después el matrimonio se trasladó al estado de Arkansas, donde comenzó a fraguarse la carrera política de su esposo. Allí Hillary impartió clases de derecho en la universidad estatal.
En 1978 Bill Clinton fue elegido gobernador de Arkansas, y su consorte, convertida en primera dama del estado, fue designada por el entonces presidente de los Estados Unidos, Jimmy Carter, como miembro de la Legal Service Corporation, organismo no lucrativo creado por el Congreso estadounidense para asegurar el acceso de todos los ciudadanos a la asistencia legal. La brillante carrera de Hillary Clinton no pasó desapercibida para algunos medios, que la incluyeron entre los cien abogados más influyentes del país en los años 1975, 1979, 1988 y 1991.
En esta etapa como primera dama de Arkansas combinó sus actividades laborales con el apoyo a distintas organizaciones relacionadas con la infancia: fue presidenta del Comité Educativo de Arkansas, participó en labores asistenciales en el Arkansas Children´s Hospital y cofundó un servicio público de asistencia legal para familias y niños. En la campaña para las elecciones presidenciales del 3 de noviembre de 1992, que llevarían al candidato demócrata Bill Clinton a la Casa Blanca, Hillary Clinton hubo de jugar un importante papel. Durante esa campaña, Hillary hizo frente a las afirmaciones de la ex-cantante de cabaret Jennifer Flowers, que aseguró haber mantenido relaciones con Bill Clinton durante doce años. Hillary manifestó: «No estoy aquí como la pobre mujercita que viene a salvar a su marido. Estoy aquí porque lo quiero, lo respeto por lo que ha pasado y por lo que hemos pasado juntos… Si eso no es suficiente para la gente, pues que no le voten».
Con esta declaración se ganó la simpatía de muchas mujeres americanas. La victoria de su marido y del grupo demócrata la convirtió en la primera dama de Estados Unidos. Hillary representó desde el principio al sector más avanzado de las norteamericanas y rompió con el arquetipo tradicional. Sobre el protagonismo de las mujeres en la vida pública aseguró que había nacido «un nuevo orden mundial en la relación entre los sexos». Mujer de carácter, que no sabe permanecer quieta ni tolera intromisiones en su vida privada, tuvo algunos enfrentamientos con periodistas. Por todo ello fue criticada por quienes defendían un papel más tradicional para la primera dama.
El 6 de noviembre de 1996 fue reelegido Bill Clinton como presidente de Estados Unidos, frente al republicano Bob Dole. Hillary aprendió a mirar a su marido de una forma embelesada en cada discurso y ofreció una imagen sumisa para acercarse más a lo que en Estados Unidos se entiende por primera dama. Pero entonces estalló el llamado caso Lewinski, un escándalo sexual que puso en riesgo la segunda presidencia de su marido. Hillary tuvo que enfrentarse a uno de los peores momentos de su vida pública y privada: las acusaciones contra su marido de perjurio y obstrucción a la justicia tras haber ocultado su relación adúltera con una becaria de la Casa Blanca. A Hillary no le faltaron las señales de apoyo y solidaridad de gran parte de la sociedad e incluso de numerosas mujeres, líderes de opinión, de otros países. Lejos de amedrentarse, la primera dama saltó a la primera línea de defensa de su marido, al que acompañó en todo momento durante la votación del Senado sobre su destitución.
En 2000 fue elegida senadora por el estado de Nueva York, cargo para el cual volvió a ser votada en 2006. Luchadora infatigable y ambiciosa, a inicios de 2007 hizo pública su intención de presentarse a la nominación demócrata a la presidencia de Estados Unidos. Tras unas intensas elecciones primarias en el seno del Partido Demócrata, en junio de 2008 decidió retirar su candidatura a la presidencia, después de que su contrincante, Barack Obama, consiguiera la mayoría de votos necesaria para la nominación. Tras ganar las elecciones de 2008, Barack Obama la eligió para desempeñar el cargo de secretaria de Estado.
Liderazgo es el conjunto de habilidades gerenciales o directivas que un individuo tiene para influir en la forma de ser o actuar de las personas o en un grupo de trabajo determinado, haciendo que este equipo trabaje con entusiasmo hacia el logro de sus metas y objetivos. También se entiende como la capacidad de delegar, tomar la iniciativa, gestionar, convocar, promover, incentivar, motivar y evaluar un proyecto, de forma eficaz y eficiente, sea éste personal, gerencial o institucional (dentro del proceso administrativo de la organización). Ser un o una líder en política implica disponer de recursos para dirigir grupos sociales, desarrollar capacidades para influir, convencer y persuadirlos; motivar y comunicar efectivamente; administrar una plataforma de exposición que genere notoriedad; perfeccionar los talentos personales con base en una severa disciplina; entender el funcionamiento de las instituciones y aplicar la inteligencia y las habilidades en beneficio del pueblo; desarrollar estrategias efectivas para imponerse a los obstáculos y a los opositores; mantenerse vigente, generar impacto y asumir el poder como vía de transformación. Además de estos elementos, también se considera el discurso, la oferta, propuestas, trayectoria, objetivos, contexto, posicionamientos, ideología, formación, valores, perspectiva, proyectos, programas y la personalidad de los actores.
El Liderazgo Femenino no es otra cosa que la utilización de las características propias de las Mujeres para ejercer el liderazgo en cualquier ámbito. Esto es posible gracias a las características propias que nadie en nuestro tiempo puede negarles a las mujeres. De acuerdo a estudios hechos por Beauvoir y Fisher estudiosas de temas femeninos, afirman que el rol de la Mujer está condicionada al entorno político y cultural en que se encuentra inmersa y también está condicionada a su herencia biológica Hoy en día las mujeres están dejando atrás su rol secundario y el mundo privado que las mantenía recluidas y alejadas del mundo público, ellas se están incorporando a la población económicamente activa, a la educación; están mejorando su calidad de vida, han aprendido a regular sus tiempos y momentos de maternidad; están disfrutando de su sexualidad, en definitiva están logrando un lugar de relevancia en la sociedad.
Ahora bien, conviene preguntarse sobre las oportunidades que tienen las Mujeres para ser líderes, y pareciera ser que la respuesta sería que tienen las mismas oportunidades en tanto actúe como un hombre, pensando que ése ha sido el «tipo» de liderazgo y dirección que ha primado hasta hoy. ¿Es cierto que las Mujeres tienen hoy en día más oportunidades de asumir roles de liderazgo y puestos de alta dirección en la medida que actúen como hombres? Pues bien, ¿cómo actúan los hombres? Los hombres compiten; se dedican en exclusivo a su carrera profesional o a su trabajo en términos generales, sacrifican tiempo de su vida privada en pos de lograr metas organizacionales; ordenan su mundo público a su manera porque trabajan con el supuesto que su mundo privado está bajo control, porque hay alguien que está a cargo de ello; extienden y ordenan su agenda de actividades en función de los requerimientos de la organización; siempre tienen tiempo para su trabajo: cenan, beben y se reúnen en horarios fuera de oficina para trabajar estrategias políticas; están disponibles para promociones, viajes y asistencia a congresos; trabajan y estudian para mejorar su posición en la organización.
Por años las Mujeres que han alcanzado cargos de alta dirección y asumido roles de liderazgo en las organizaciones se han visto envueltas en el estigma de la masculinización, esto es, actuar como hombres para mantener sus posiciones de poder en sus respectivas organizaciones; deben ordenan su mundo público en perjuicio de su mundo privado, porque a diferencia del hombre, para ellas el mundo privado está a su cargo y no a cargo del otro. Después de su aclamado discurso en el Foro de Liderazgo de Mujeres Demócratas en Washington D.C, Hillary Clinton reafirma su liderazgo en su campaña electoral al disipar las dudas que existían sobre su capacidad y fuerza para superar las dificultades que ha tenido.
Reconocida como una mujer luchadora, Hillary Clinton demuestra cinco lecciones clave sobre el liderazgo:
– Negarse a ser atado por la tradición
– Tener la fuerza para evolucionar
– Rechazar posiciones o roles de género
– Balancear idealismo con pragmatismo
– Saber comunicar para inspirar acción
El poder de Hillary Clinton se cimienta en ella misma, y no en ser la esposa de Bill Clinton, el ex presidente de Estados Unidos entre 1992 y 2000. Según una encuesta de CNN y ORC Internacional, difundida en febrero de 2014, un 64% considera a Hillary como un líder más fuerte y decisiva, 14 puntos por encima del presidente Barack Obama, y un 59% cree que la ex senadora puede manejar mejor el gobierno sobre un 43% que respalda al mandatario en funciones.
Hillary Clinton ha sido cuestionada por dos decisiones como funcionaria del gobierno de Estados Unidos: una como senadora de Nueva York, al apoyar la invasión de George W. Bush a Iraq en 2002, y otra sobre la muerte de cuatro estadounidenses en Bengazi, mientras era secretaria de Estado en 2012. Sobre el primer tema, Clinton señaló que fue un error apoyar a Bush en la guerra contra Iraq. “Me equivoqué, sencillamente”, dijo. En 2013, Clinton fue llamada a declarar al Congreso sobre los atentados en las misiones diplomáticas de Estados Unidos en Libia, en donde murieron cuatro personas, a lo que respondió: «Como he dicho en numerosas ocasiones, asumo la responsabilidad». Aunque algunos políticos y críticos alabaron su manejo de crisis, otros mantuvieron cuestionamientos sobre su desempeño por no haber hecho los esfuerzos posibles para evitar esas muertes.
El Debate de Hillary con su oponente, Donald Trump Hillary fue denominada por los especialistas como la ganadora en el primer debate televisado entre ella y Donald Trump, Hillary Clinton llegó al debate decidida a demostrar que uno solo de los candidatos está listo para ser presidente. Clinton presionó, picó y citó las palabras de Donald Trump, provocando al quisquilloso candidato republicano. Trump mordió el anzuelo, interrumpiendo repetidamente y con molestia a lo largo de la noche. No pudo evitar los ataques, aun cuando era obvio que le responderían, como cuando criticó a Clinton por suspender su campaña para dedicarse a preparar el debate. Sí, lo hice. ¿Y sabe para qué más me preparé?”, respondió Clinton. “Me preparé para ser presidente”.
El liderazgo de Hillary es definido por su compañero de fórmula, Bernie Sanders como unificador, y sin duda para quienes estudiamos el liderazgo, la Sra. Clinton, representa y engloba todas las características de una líder altamente efectiva, no solo por su trayectoria política, que deja ver su gran inteligencia y manejo del conocimiento, sino también en su lado humano y como mujer, al enfrentar elegantemente lo que sucedió durante el mandato presidencial de su esposo, Bill, al ser descubierto en una infidelidad con su secretaria. Sin duda Hillary es reconocida como una mujer luchadora que ha dejado muy bien paradas a las mujeres, es una referente para la feminista moderna, que no busca estar por encima del hombre sino mas bien entrar en los lugares y espacios que históricamente han sido reservados para ellos.
Gran activista de los derechos de la mujer, es defensora de la equidad salarial, acceso a guarderías, permisos familiares, aumento del salario, apoyo al aborto entendiendo la supremacía y autonomía que cada mujer tiene sobre su cuerpo. Ha demostrado también su carisma, al aceptar errores públicamente durante el ejercicio de sus funciones políticas y ha asumido responsabilidades sin excusas. La Futura presidente Clinton es sin duda un icono de la política norteamericana y mundial.
Referencias
Covey, Stephen R.: Los siete hábitos de la gente altamente efectiva, Ediciones Paidós Ibérica, México, 1997.
http://www.altonivel.com.mx/50265-liderazgo-de-hillary-para-llegar-ala-casa-blanca.html http://www.forbes.com.mx/estilos-de-liderazgo-politico-i/#gs.iftupU8
http://www.masconsulting.es/blog/2015/05/25/las-seis-cualidades-delliderazgo-politico-del-siglo-xxi-articulo-de-diego-crescente-en-la-razon/
http://www.mercaba.org/FICHAS/Capel/liderazgo_politico.htm www.biografiasyvidas.com/biografia/c/clinton_hillary.htm
Realizado por: Nermary Yibirin. Abogada (UGMA, 2008) MSc. en Hermenéutica Bíblica (ProMeta, 2009), Coach Neurolingüística Certificada por la ICC (Idear, 2015). MSc. en Life Coaching (CIU, 2016) MSc en Sexología (CIPPSV, 2016)
