Menstruar con libertad.

Menstruar con libertad.
marzo 20, 2019 Susana Reina


Una acción transformadora de la situación educativa de muchas niñas venezolanas se encuentra en pleno desarrollo en este momento en Maracaibo. Las amigas de la Fundación Proyecto Mujeres se dieron cuenta que niñas de escuelas populares en la ciudad, pierden de 2 a 3 días de clases al mes por tener la menstruación. Es una barbaridad esta cifra, y dolorosa además, porque a cuenta de un proceso corporal y fisiológicamente normal, propio de su sexo, las niñas se están quedando atrás en su desarrollo formativo.
No van a clases por muchas razones: no hay agua en el plantel educativo, no hay baños que funcionen, no tienen toallas sanitarias o tampones, no hay detergente para lavar la ropa manchada, no hay analgésicos para los malestares. Lo que si hay y de sobra son mitos asociados a la menstruación, mucha pena y temor de hablar sobre el tema y sobre todo desconocimiento de cómo funciona el propio cuerpo y cómo prevenir los embarazos.
Con fondos internacionales se armaron del proyecto “Niñas Visibles” para diagnosticar toda esta calamidad en escuelas de la zona oeste de Maracaibo, proveer a las chicas y a sus madres instrucción sobre el tema y como medida de acción inmediata, proporcionar una pulsera para que las niñas sepan contar los días del ciclo ovulatorio además de una copa menstrual que tiene la ventaja de que es reutilizable y mucho más higiénica que las compresas sanitarias. Con apoyo de otras ONGs en varios países del mundo, están recibiendo este kit menstrual, que busca acortar los días de ausencia para que las niñas reciban clases en sus días de regla.
Casualmente el mes pasado, los premios Oscar en Hollywood, otorgaron el máximo reconocimiento a un documental que visibiliza el tema: “Period. End of Sentence”. La película fue filmada en Delhi y recoge la lucha de unas mujeres indias que, contra la oposición patriarcal, montan una fábrica de compresas asequibles y biodegradables, conscientes de que su impacto podría cambiarles la vida a las mujeres en el pueblo. En toda la India, casi un tercio de las niñas faltan a la escuela durante el periodo debido a la falta de recursos adecuados, como en Venezuela.
Al recibir la estatuilla, la directora iraní estadounidense de 25 años bromeó diciendo «No estoy llorando porque tenga la regla ni nada de eso… no me puedo creer que una película sobre la menstruación haya ganado un Oscar». Su productora Melissa Berton aludiendo al título del film expresó: » ¨Tengo el periodo¨ puede que marque el final de una frase, pero nunca la educación de una niña». (por la traducción del juego de palabras en inglés de period a punto, como signo de puntuación en una oración)
El tema de la menstruación cada vez más se ha convertido en una tendencia importante en la lucha por los derechos sexuales y reproductivos de niñas y mujeres. Muchas famosas, como Meghan Markle, ya están pronunciándose para exigir el fin de la “pobreza menstrual”, con hashtags como #menstrualequity #freeperiods #manchoynoestoyenferma.
Basta ver en la historia cómo el tema de la menstruación ha sido vivido por muchas mujeres como un estigma, con vergüenza y sin el mínimo acceso a la protección necesaria para un proceso normal que se vive mes a mes. Nuestra biología silenciada, nuestra sangre mirada con asco y repulsión, nuestro derecho a apropiarnos del propio cuerpo, negado.
Y es que la construcción social y cultural que se ha hecho de un fenómeno fisiológico tan natural como este, busca instalar la creencia de que menstruar nos hace débiles e inadecuadas introduciendo así un factor de desigualdad de género, sin entrar al tema de tener que pagar impuestos mes a mes, por toallas y otros dispositivos necesarios para atender el sangrado con un mínimo de higiene.
Por ello aplaudimos iniciativas como estas, que descubren y señalan las costumbres culturales y conductuales más arraigadas que obstaculizan el desarrollo personal, educativo y profesional de tantas niñas y mujeres, pero que además inciden en la provisión de un entorno que entiende y ofrece el soporte necesario para que la menstruación se viva con la libertad que se merece.
El documental está disponible en Netflix y a las colegas marabinas las encuentras en las redes como @proyectomujeres. Apoyémoslas con donativos a su cuenta paypal para que puedan extender este trabajo a muchas más escuelas y lograr que ninguna niña venezolana se nos quede atrás.
Que el menstruar, con toda la connotación de censura, tabú, incomodidad, suciedad o sufrimiento que nos han vendido desde el patriarcado, deje de ser una excusa para ponernos al margen de las oportunidades que nos permitirán en el futuro acceder a posiciones de poder, es parte importante de la agenda feminista.

Las opiniones expresadas de los columnistas en los artículos son de exclusiva responsabilidad de sus autores y no necesariamente reflejan los puntos de vista de Feminismoinc o de la editora.

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