Las mujeres lideran la industria del cannabis

Las mujeres lideran la industria del cannabis
octubre 31, 2018 Susana Reina

 “La marihuana podría ser la primera industria de un billón de dólares no dominada por los hombres” Newsweek

Asistimos en Vancouver a la premier del documental “Mary Jane: The Women of Weed” de la directora y productora estadounidense, Windy Borman, a días de haberse legalizado el consumo medicinal y recreacional de marihuana para adultos en Canadá.

El tema, como es lógico suponer, es mainstreaming en estos momentos en América del Norte. Y entre toda la información que se ofrece por todos los medios, toparnos con el dato de que la industria está dominada por mujeres, no como consumidoras sino como empresarias y CEOs de esta millonaria industria en USA y Canadá, constituye un descubrimiento sumamente interesante que nos estimula a revisar las razones de este inusual hecho.

Según reporte de Ameco Press, estadísticas del Marijuana Business Daily de 2015 demuestran que el 36% de los puestos directivos en estas empresas los ocupan ellas. Esto se acerca mucho más a la paridad que se observa en otros negocios, que en conjunto está por el orden del 22%.

Las áreas del cannabis donde están bien posicionadas las mujeres actualmente son los laboratorios de investigación, así como en manufactura y producción de infusión, del cual la mitad de los puestos de toma de decisiones los ocupan mujeres. Otro rubro donde se han posicionado son los dispensarios y las tiendas de recreación, mientras que en el ramo de mayoristas y de inversión todavía hay áreas de oportunidad para ellas.

La presencia masiva de mujeres en este sector empresarial llevó a la Unión Americana de Mujeres del Cannabis en USA a reunirse el año pasado en Los Ángeles, en una Cumbre de Empoderamiento de las Mujeres Empresarias de Cannabis para compartir prácticas de éxito, coincidiendo en que “hay más mujeres líderes en esta industria que en cualquier otra…sin embargo, todavía queda mucho trabajo por hacer”.

Para dar visibilidad a este fenómeno, la cineasta Borman se dispuso a entrevistar a más de 100 hombres y mujeres dentro del mundo del cannabis con el ánimo de entender mejor las causas: “Claramente, algo sobre el cannabis estaba atrayendo más liderazgo femenino, y quería averiguar por qué», dijo Borman a The Georgia Straight.

Como resultado, en febrero de 2016 comenzó a filmar un documental que muestra las historias de las “puffragettes”. (http://maryjanesfilm.com/). Puffragettes es una adaptación del término de finales del siglo XIX y principios del XX que se dio a las mujeres que lucharon por el derecho al voto en el Reino Unido (sufragettes con p de “pot” como se le llama coloquialmente a la marihuana), excepto que en lugar del lema de aquellas «hechos, no palabras (deed, no words), estas mujeres creen en «hierba, no palabras” (weed, no words). Una puffragette es, a juicio de los creadores del documental “una mujer (u hombre) que trabaja por la equidad de género, la justicia social y la sostenibilidad ambiental en la industria del cannabis”.

«Es una película sobre paridad de género, sostenibilidad y diversidad», dice la creadora de Mary Jane. «Esos tres valores fundamentales han estado en todas mis otras películas, así que pensé que tenía la oportunidad de ayudar a elevar las historias de estas mujeres líderes».

Conocida por documentales aclamados por la crítica como “The Eyes of Thailand” y “The Big Picture: Repensando la dislexia”, Borman dice que quería representar a la industria a través de una lente dura y diversa, quería que cada mujer se viera a sí misma en las puffragettes.

La premier fue presentada por Donna Johannson, fundadora de Canadian Women in Cannabis (canadianwomenincannabis.ca), organización desde la cual están aliando a todas las mujeres que deseen incorporarse a la naciente industria en ese país. Proponen una lucha contra las farmacéuticas tradicionales, el uso probado de hierbas naturales para tratar afecciones crónicas y la defensa por una mejor calidad de vida.

Techo de Cristal

Con un juego de palabras hablan de romper el Green Ceiling (techo verde) o Grass Ceiling (techo de yerba) vs Glass Ceiling (techo de cristal). Advierten que si bien las mujeres han crecido profesionalmente en la industria del cannabis y los números son impresionantes en comparación con otros sectores económicos, todavía existe el riesgo de que lleguen a encontrarse con el techo de cristal que existe habitualmente en todos los negocios.

Precisamente por ello, con este documental Borman quiere transmitir un mensaje empoderador: «En lugar de tener que jugar el juego en el que se quedan atrapadas en el techo de cristal y ver a todos sus homólogos masculinos promovidos más allá de ellas, las mujeres deben saber que pueden crear su propia empresa, ser la CEO y contratar a otras mujeres y personas de color para crear una cultura corporativa para la que quieran trabajar».

La conocida artista entrevistada en el film, Melissa Etheridge afirma: «Hay tantas oportunidades en la industria del cannabis porque no se ha establecido dentro del paradigma de los negocios masculinos del viejo mundo. Las mujeres pueden cultivarlo, curarse con él y ahora pueden hacer un negocio «. Y es que precisamente, lo que me pareció más valioso de la cinta, es que cuestionan los estereotipos asociados al consumo de cannabis aportando valor informativo y formativo, sobre todo para quienes crecimos escuchando que la marijuana es dañina y viendo como aún meten a la gente presa por consumirla o venderla.

Pero por encima de todo eso, es disruptivo y rompedor afirmar que este sea un nicho propicio para que las mujeres demuestren sus capacidades gerenciales. Imagino que en los tiempos en que se legalizó el consumo y venta de alcohol y tabaco en el mundo era imposible pensar que las mujeres pudieran asumir las riendas de tan lucrativos negocios, pero lo cierto es que ahora están cambiando la faz de la industria de más rápido crecimiento en la actualidad: el cannabis. Interesante tópico para hacerle seguimiento de cerca.

 

Las opiniones expresadas de los columnistas en los artículos son de exclusiva responsabilidad de sus autores y no necesariamente reflejan los puntos de vista de Feminismoinc o de la editora.

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