Por Gabriela Caro
Es un término des-calificativo, que la sociedad machista, suele adjudicar y señalar a las feministas, para despreciar su lucha y atentar contra su legado, haciendo referencia a la ideología Nazi.
Origen del término:
Feminazi, es un término que empezó a utilizarse y popularizarse a inicios de la década de los 90´s, por el locutor de radio Estadounidense Rush Limbaugh, quién se asoció al Partido Republicano de los Estados Unidos, para señalar y condenar socialmente a todas aquellas mujeres que defendían el derecho al aborto, lo cual consideraba como un “holocausto”.
Para entender las diferencias básicas entre el Movimiento Nazi y el Movimiento Feminista, es necesario resaltar que:
Movimiento Nazi
- Supremacía Racial
- Exterminio de las clases inferiores
- Creación del Nacionalismo
- Propagación del Neoimperialismo
- Defensa y propagación del antisemitismo
- Violencia generalizada
Movimiento Feminista
- Inclusión social
- Defensa de los Derechos Humanos
- Igualdad de Oportunidades
- Conciliación laboral, económica y política
- Equidad
- Protección social
- Visibilización socio-cultural
Consideraciones:
- Existen feministas negras, judías, latinas, musulmanas y con diversidad funcional, es decir, las feministas somos libres de pertenecer a cualquier culto, religión o credo, de cualquier región o nacionalidad, raza o apariencia, porque la base del movimiento esta en la igualdad de oportunidades para todas, por encima de las diferencias.
- Las feministas no tenemos la creencia de superioridad o “supremacía” ante ningún grupo social, al contrario por conocer de primera mano, el trato indiferente y con desden de la sociedad, sólo reclamamos la igualdad y el trato equitativo.
- El sistema social nunca ha instaurado, ni defendido la supremacía femenista, por lo que no existen medidas de estado, ni politico-culturales que hayan favorecido el establecimiento de un sistema de “supremacía” feminista, por lo que es más que absurdo asociar dicho término a la lucha de las mujeres.
Por lo tanto, resulta como mínimo inadecuado, inapropiado e irreal, calificar de feminazi a cualquier feminista que exprese su inconformidad con un sistema, que la reprime y se mueve por el cambio para el progreso, por todos los medios que tenga a su alcance.
Sólo para tener idea de lo irracional de la comparación, “El Holocauto Nazi”, incluyó en cifras confirmadas un total de 7.527.387 asesinatos como mínimo en campos de detención, tránsito, concentración y exterminio nazi, sin mencionar los casos de asesinatos de anónimos, sin datos, olvidados y no contabilizados fuera de los campos antes mencionados.
Según cifras actualizadas en fecha 08-08-2016 en el portal oficial del Holocausto.net, la Segunda Guerra Mundial arroja cifras de víctimas que superan los 60.000.000 de personas pertenecientes a la Unión Sovietica, Alemania, Polonia, Japón, Yugoslavia, Rumania, Francia, Austria, Italia, Gran Bretaña, Finlandia, Canada, India, Holanda, Belgica, Nueva Zelanda entre otros paises.
Personalmente no entiendo, como puede resultar familiar o levemente parecido la analogía entre los nazi y su holocausto y las feministas y nuestra lucha, por considerar que hombres y mujeres, disfrutemos de los mismos derechos y cumplamos con los mismos deberes.
Sí, absoluatmente radical y dañino, el concepto de la igualdad.
Así que amiga o amigo, si tú no practicas, la violencia en su macro o micro expresión, piensalo un par de veces antes de categorizar o señalar de “Feminazi” a su conocida o desconocida radical, que cree, valora y defiende la igualdad y equidad por ella, por usted, por ti y por todas.
Ah, por cierto las feministas no, no nos discupalmos por sentir rabia o expresar ira en nuestras manisfestaciones, porque recibimos menos, de lo que merecemos y más cuando la rabia, es una emoción, que indica la necesidad de un cambio y la incomformidad con un sistema desfavorecedor para las mujeres en general.
NOTA: A quién le interese indagar más a profundidad del impacto del “Holocausto” y las cifras actuales de las víctimas, le recomiendo el siguiente portal www.elholocausto.net