Susana Reina es una atrevida y día a día lo demuestra. Está convencida que debemos ser audaces, romper moldes, ser lo que queremos ser, ser lo que somos realmente y, sobre todo, atrevernos. No es fácil porque muchos sesgos se interponen, síndromes y miles de metáforas que dan nombre a las barreras con las que nos conseguimos.
Ella está muy clara y día a día lucha por ello. Un día decidió que iba a dar un paso más, y creó FeminismoINC, una ONG que es mucho más que ello, un espacio de reflexión, de movimiento, de conciencia y de lucha. Un espacio de atrevidas…y ella, la atrevida mayor.
Susana publica su segundo libro. Y hoy te queremos mostrar quién está detrás de este libro y qué vas a conseguir en él.
Una palabra constante que se repite en ti es «Atrevidas». Nombre de tu Escuela, parte de tus intervenciones y hoy titula tu segundo libro. ¿Qué significado tiene para ti esa palabra?
Para mí, ser atrevida es arriesgarse, es osar, es dar un paso al frente, es hacer cosas que de pronto dan vergüenza o generan culpa o se salen de lo que los demás esperan. Si tú lo buscas en el diccionario, atrevimiento tiene que ver con faltar al debido respeto, salirse de las normas.
El atrevimiento es fundamental para las mujeres que siempre nos han educado en la sumisión, en el silencio, en la aquiescencia o el control de nuestras emociones, de nuestros pensamientos de nuestra palabra sobre todo y para poder hacer cambios en tu entorno, cambios con tu familia, cambios en tu trabajo o en tu comunidad, es fundamental dar ese paso.
Pero para dar ese paso, es fácil decirlo y decirle a la mujer atrévete, pero para hacerlo tienes que contar con una serie de competencias conversacionales que involucran tu lenguaje, tu cuerpo, tu emoción para que sientas que tienes las herramientas necesarias que te ayuden a romper juicios, que te ayuden a pisar más firme, que te ayuden a controlar y gestionar tus emociones y que ellas no te traicionen a ti. Y además sentir que tienes un cuerpo poderoso con el que te puedes mover de un espacio en el que te confinaron y que con ese atrevimiento puedas lograr desde tus sueños personales hasta tus sueños colectivos.
Tú dices «Estoy convencida que no existe experiencia de transformación cultural que no pase primero por un proceso de transformación personal». ¿Qué significa esa transformación personal, cómo lograrla y cómo a partir de ella incidir en nuestra sociedad?
No hay transformación social que no nos involucre; somos parte de un nicho, somos parte de una cultura y no solamente la cultura nos moldea a nosotras; nosotras, también transformamos la cultura y por eso, si queremos hacer ese cambio, si queremos vivir una sociedad mucho más amable con las mujeres, un entorno más feminista, pues somos nosotras las que tenemos que empezar el cambio en cada una de nosotras, de nuestro ser; asumirnos como agentes de cambio involucra liderazgo. Por eso el atrevimiento me gusta tanto porque no hay mujer líder que no se atreva.
Pensar en que tú puedes hacer cambios que nos lleven a cambiar creencias colectivas acerca del papel de las mujeres en la sociedad, sin atrevernos a meter el dedo en la llaga o sin incomodar a nadie, es ilusorio. Y es ilusorio porque estamos yendo al corazón de un sistema patriarcal que nos ha relegado siempre al espacio de las locas cuando nos quejamos, de las víctimas cuando protestamos, de las anormales cuando denunciamos.
Entonces sí requiere mucho arrojo, mucho brío, mucha valentía poder decir “esto no me gusta”, poder cuestionar lo que me asignaron solo por ser mujer. De allí que, entonces en el momento en que ya yo aprendo con mi lenguaje, mi cuerpo, mi emoción a dar ese paso, entonces todo a mi alrededor empieza a cambiar y a través de ese cambio, unido al cambio que genera la compañera -porque esto es un esfuerzo colectivo, no individual- las culturas van mutando y es cuando vemos, en el lapso de unos años -porque esto es un proceso que se cocina- a fuego lento vamos avanzando. Y esta es la historia del movimiento feminista, un montón de atrevidas que empezaron de a poco y ya hoy por hoy es un movimiento global indetenible.
¿Qué vamos a encontrar en Atrevidas: Manual Personal para el Activismo Feminista?
Es una guía de trabajo personal y colectivo conducente a fortalecer la competencia del Atrevimiento entendida como una competencia conversacional educable, hasta que se convierta en pericia, capacidad o aptitud idónea para intervenir un sistema social. Es el producto del trabajo con muchas mujeres que pasaron por mi Escuela para Atrevidas y todos los aprendizajes que obtuvimos allí, sobre todo para quienes trabajan en la defensa por los derechos de las mujeres, tengan en estas recomendaciones, herramientas, tips, lecturas y sugerencias, una guía súper útil para que el impacto de sus acciones de incidencia tengan mayor éxito.
¿En qué proyectos está Susana Reina?
Como activista estoy básicamente en mi ONG, Feminismo INC, trabajando desde hace ya nueve años con muchas mujeres en este tema del empoderamiento; además, haciendo publicaciones que lleven a sensibilizar y a comprender cuál es el planteamiento del feminismo como movimiento político y social y así tenga más aliadas y aliados, más adeptos, más gente que sepa aprovechar sus bondades y repetir o difundir el mensaje. Feminismo INC es un proyecto básicamente editorial. Creo que la palabra hace posible el cambio; las palabras tienen mucho poder. Este es un tema del cual no se conversaba antes como se conversa hoy; por lo tanto, creo que allí tenemos un punto ganado, el haber generado esa conversación y esa discusión en todos los espacios.
Por otro lado, estoy involucrada con el trabajo corporativo. Creo que las mujeres en la economía y en el mundo laboral nos jugamos una lucha importantísima porque si las mujeres no tenemos autonomía financiera y económica, pues estamos más sujetas a círculos de violencia y somos mucho más vulnerables; por lo tanto, yo creo que ese es un espacio fundamental que nunca dejo por fuera en mis trabajos a través de investigación, documentación y difusión.
También me mueve mucho el tema de la libertad de expresión en mujeres vulneradas como, por ejemplo, las presas de conciencia, las presas políticas. Estoy trabajando mucho en ese tema ahora y estoy siempre abierta a alianzas con otras organizaciones también defensoras de los derechos humanos de las mujeres para unir y poner la mano donde sea que se necesite.
Un mensaje…
Quiero ayudar a las mujeres que se constituyen a sí mismas en su principal barrera para su desarrollo. Las que piensan que no prosperarán igual que sus compañeros varones porque ellas habrán de parir y cuidar hijos, aún antes de planificar hacerlo. Para prosperar en las organizaciones hay que desearlo fervientemente, hay que ofrecerse a liderar sin tapujos, hay que competir. Si el obstáculo está dentro de ti, revísalo para indagar hasta que punto es parte de una programación mental que puede ser alterada y mejorada, incluso para el bienestar y crecimiento de tus hijos y de tus relaciones familiares y de pareja.
***
Entrevista originalmente publicada en Visionarias