Explotación sexual y contagio de VIH en Nueva Esparta

Explotación sexual y contagio de VIH en Nueva Esparta
octubre 5, 2019 Reina Alejandra Baiz Villafranca

El día 20 de agosto de 2019 trascendió en redes sociales, en medios de comunicación tanto regionales como nacionales, la detención del ciudadano Jacinto Miguel Canelón Rodríguez, de 35 años de edad, en el sector Los Robles Sur, calle Pedro Luis Rodríguez del Estado Nueva Esparta, por funcionarios de la Subdelegación de Porlamar del Cuerpo de Investigaciones Científicas, Penales y Criminalísticas. De acuerdo con la información difundida por el Comisario Douglas Rico, se encuentra siendo investigado por presuntamente tener “una red de reclutamiento y captación de personas de sexo femenino”, a las cuales captaba por medio de anuncios y publicaciones en diarios de circulación regional y plataformas digitales con ofertas engañosas, para trabajar en viajes turísticos.

Al entrevistarse Jacinto Canelón con las mujeres víctimas les ofrecían trabajo como damas de compañía, obligándolas a mantener relaciones sexuales con él, para después ser explotadas sexualmente en varias habitaciones que se encontraban en un anexo oculto de su residencia, a cambio de recibir beneficios económicos.

También trascendió la información que el detenido padece del virus de inmunodeficiencia humana (VIH), contagiando a las mujeres abusadas sexualmente por él.

Al conocer y leer sobre los hechos, se visibiliza un nuevo caso de explotación sexual de las mujeres, como consecuencia de la cosificación de sus cuerpos, al ser consideradas como objetos sexuales destinados para el disfrute y placer de otras personas, negándose su derecho a decidir sobre su propio cuerpo, su sexualidad, y es que el placer se convierte en negocio, porque existen personas que pagan por obtener los servicios sexuales de mujeres.

Los casos de explotación sexual de las mujeres se incrementan en contextos como los que vivimos en Venezuela, en una Emergencia Humanitaria compleja, donde las mujeres están tratando de sobrevivir cada día, y es una realidad que el salario mínimo es insuficiente para que una sola persona viva, no alcanza ni llega a cubrir el 1% de la canasta básica, por ello no es extraño que mujeres crean en estas ofertas engañosas y terminen accediendo por la misma desesperación para poder sobrevivir.

Pero a Jacinto Canelón no le bastaba con abusar y explotar sexualmente a las mujeres, también les transmitía el virus de inmunodeficiencia humana (VIH), evidenciando la misoginia presente, es decir el odio, el desprecio que siente por las mujeres, por ello las contagiaba.

Ante estos hechos, vale recordar que el Estado Venezolano tiene la obligación nacional e internacional de realizar una investigación objetiva e imparcial, juzgar, sancionar, reparar el daño ocasionado a las víctimas y proporcionarles un tratamiento integral para superar las consecuencias del abuso y explotación sexual, así como de la transmisión del VIH.

Lamentablemente en Venezuela el tratamiento constituye una de las obligaciones que tiene pendiente el Sistema de Administración de Justicia con competencia en delitos de violencia contra la mujer, al no contar con las instalaciones ni el personal capacitado para proporcionarlo.

Finalmente, aunque el Estado tiene la responsabilidad principal en prevenir todas las formas de violencia de género contra las mujeres incluyendo la violencia sexual, cada persona también es responsable en la prevención y en no mantener una actitud indiferente ante estos hechos, considerando que la indiferencia estimula e incrementa todas las formas de violencia. Si usted en su comunidad observa hechos irregulares, comportamientos extraños, acuda ante las autoridades competentes y denuncie los hechos, el silencio favorece la impunidad.

 

Fuente:

Cicpc detuvo a hombre por explotación sexual en Maneiro. Sol de Margarita. Publicado el 20/08/2019. Disponible en: http://www.elsoldemargarita.com.ve/posts/post/id:221934/Cicpc-detuvo-a-hombre-por-explotaci%C3%B3n-sexual-en-Maneiro

 

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