Siempre he pensado que los dos campos en los que las mujeres debemos estar bien representadas son la política y la economía. Nadie pone en duda que somos perfectas para labores sociales, educativas, familiares, filantrópicas, caritativas, cuidadoras, sanitarias. Pero donde de verdad se bate el cobre, como se dice popularmente, es en los poderes públicos de las finanzas y del gobierno corporativo. Justamente es allí donde brillamos por ausencia.
Por ello celebro la existencia y acción de la Alianza Venezolana Empresarial por el Liderazgo de las Mujeres (AVEM), en torno a la creación de espacios para que se debata el importante rol de las mujeres en el desarrollo económico de nuestro país. Desde AVEM impulsamos, asesoramos, investigamos, divulgamos y entrenamos sobre aspectos que mejoren la participación gerencial y directiva de la mujer.
Esta alianza que fundamos en 2016, lleva ya casi 50 adhesiones de medianas y grandes empresas, donde muchas mujeres hacen carrera gerencial con enormes e inocultables obstáculos como en todas las empresas privadas y públicas en el mundo. Hacen vida también en AVEM cámaras gremiales privadas y algunos organismos internacionales, deseosos de apoyar con su vasta experiencia todo lo que signifique justicia social, igualdad y equidad de género.
Es tendencia mundial
El hecho de que en el sector privado venezolano se pueda diseñar una agenda pro-inclusión y diversidad, en gran medida está incentivado por las tendencias mundiales que se están registrando en torno a los Objetivos de Desarrollo Sostenible de la Agenda 2030 del Pacto Global, dentro de los cuales figura la estrategia del Programa del Sello de Igualdad que otorga Naciones Unidas a aquellas empresas que cierran sus brechas por género.
En general, vemos que las compañías trasnacionales son las más activas en la ejecución de programas de igualdad de género, por lo que a las que hacen vida en nuestro país, les bajan mandatos directos y claros desde sus casas matrices. Las criollas están más lejos de este nivel de conciencia, pero al colocarlas juntas en una misma red, comparten las buenas prácticas y se contagian del entusiasmo por revisar las políticas internas para verificar cuan inclusivas son.
En el caso venezolano, un estudio reciente del Instituto de Estudios Superiores de Administración (IESA) con fondos de la Embajada Británica en Venezuela, concluye que “con algunas excepciones, existe ausencia de políticas integrales y consistentes en materias de igualdad de género en el sector privado venezolano. Ello es preocupante en un país donde el Estado no ha cumplido con sus compromisos internacionales básicos en materia de derechos humanos de las mujeres, mediante una política pública que pueda garantizar tales derechos… Los resultados de este estudio indican que la crisis que atraviesa Venezuela ha suscitado cambios importantes para las mujeres en el ámbito laboral privado. Queda en manos de las empresas aprovechar la oportunidad de capitalizarlos mediante la adopción de una política de igualdad de género formal y explícita”
Conciliación laboral y familiar, lenguaje incluyente, publicidad no sexista, cierre de brecha salarial por género, mentoreo o programas de tutorías, formación en liderazgo, selección basada en curriulum ciego, políticas flexibles en horario y lugar de trabajo para madres trabajadoras, respeto a las licencias de los padres por nacimiento de hijos, subsidio para guarderías, hogares de cuidado para adultos mayores, apertura de cuartos de lactancia, entre otras, son algunas de las acciones que las empresas pueden ejecutar o subsidiar, conscientes de que el bienestar de las mujeres se traduce en productividad y compromiso.
Foros AVEM
Por esto, los Foros AVEM (ya se han realizado dos en 2017 y 2018 en Caracas y Maracaibo respectivamente), tienen un valor especial para posicionar valores centrales a la sostenibilidad económica, ya que descansan justamente en la valoración del talento femenino para alcanzar resultados positivos en términos de retorno de inversión, innovación y crecimiento.
Para su tercer Foro, AVEM se ha propuesto abordar el tema del impacto del liderazgo de las mujeres en el reenfoque de la estrategia empresarial. Cuatro tópicos serán trabajados: la cara femenina de los negocios digitales en Venezuela, testimonios de mujeres en sectores de baja representación, mejores prácticas organizacionales que facilitan el empoderamiento y la inclusión del talento femenino y la historia de la relación de las mujeres con el capital y el patrimonio.
Participarán en este foro brillantes ponentes como Inés Quintero (historiadora), Patricia Valladares (NetUno), Daniela Rojas (PepsiCo), Alesia Rodríguez Pardo (Inclusion Consulting Group), Yanelly Márquez (KPMG), María Elena Sequera (Makro Venezuela), Yanet Aguiar (Dentons), Claudia Valladares (Impact Hub Caracas), Magdalena De Luca (Sybven), Luz Mely Reyes (Efecto Cocuyo), María Carolina Uzcátegui (Empresaria y gremialista), Andreína Pulido (Piloto Conviasa), Angélica Hernández (Bomberos Marinos de Vargas), Aurora Echeverría (Cargill), María Ignacia Arcaya (Cisneros Media), Tachy Molina (Eurobuilding) y esta servidora (Grupo Multinacional de Seguros). Será presentado por el Embajador del Reino Unido en Venezuela, Sr Andrew Soper y contará con una conferencia inaugural sobre Igualdad de Derechos y Oportunidades como base para el Desarrollo por parte del Sr Jan Harfst, Representante Residente del Programa Naciones Unidas para el Desarrollo en Venezuela.
La entrada es libre en el Eurobuilding Caracas el próximo 12 de noviembre, para quien desee apoyar con su presencia este proyecto y hacerse eco de nuestro empeño en querer generar un impacto positivo en la transformación cultural del espacio corporativo empresarial privado venezolano, contribuyendo eficazmente a equilibrar la participación de las mujeres en los máximos niveles de dirección y gerencia de nuestras empresas. Esa es nuestra visión.
